El desarrollo sostenible es un enfoque integral que busca garantizar la satisfacción de las necesidades presentes sin comprometer la capacidad de las futuras generaciones para satisfacer las suyas. Se trata de un proceso que tiene en cuenta tanto el crecimiento económico como la protección del medio ambiente y la mejora de la calidad de vida de las personas.
El desarrollo sostenible se basa en tres pilares interdependientes: el desarrollo económico, la protección ambiental y la justicia social. Estos pilares deben trabajar juntos para lograr un futuro mejor para todos.
Para lograr un desarrollo sostenible, es necesario adoptar políticas, prácticas y tecnologías que reduzcan el impacto negativo sobre el medio ambiente y promuevan el bienestar social. Esto incluye la adopción de energías renovables, la eficiencia energética, la conservación de los recursos naturales, la agricultura sostenible y la promoción de la igualdad social y económica.
El desarrollo sostenible es un proceso continuo que requiere la participación activa de todas las partes interesadas, incluidos los gobiernos, las empresas, las organizaciones no gubernamentales y la sociedad en general. Todos deben trabajar juntos para lograr un futuro sostenible y equilibrado.
Referencias:
- Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (2019). Agenda 2030 para el desarrollo sostenible. Recuperado de https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/agenda2030/
- Comisión Europea (2019). Estrategia Europa 2020: un camino hacia un crecimiento inteligente, sostenible e incluyente. Recuperado de https://ec.europa.eu/info/publications/europa-2020-estrategia-para-crecimiento-inteligente-sostenible-e-inclusivo-2010-2020_es