La oxidación es un proceso químico que ocurre cuando un compuesto pierde electrones, lo que se conoce como «oxidación» y, por lo tanto, aumenta su carga positiva. Este proceso puede ser catalizado por el oxígeno u otros oxidantes, y puede tener consecuencias importantes en la química y en la vida cotidiana.
La palabra «oxidación» proviene del latín «oxidare», que significa «combinar con oxígeno». Este proceso químico fue descubierto y nombrado por el químico francés Antoine Lavoisier en el siglo XVIII, quien lo consideraba como la combinación de una sustancia con oxígeno.
Un ejemplo común de oxidación es la reacción entre el hierro y el oxígeno para formar óxido de hierro, que es la forma más común de la herrumbre. Cuando el hierro se expone al aire y la humedad, los átomos de hierro pierden electrones, y el oxígeno gana electrones para formar óxido de hierro. Este proceso puede ser acelerado por la presencia de sal o ácido en el ambiente.
Otro ejemplo de oxidación es la combustión de combustibles fósiles. Cuando se queman, los hidrocarburos liberan energía al combinarse con el oxígeno del aire, produciendo dióxido de carbono y agua. Este proceso de oxidación también puede ser acelerado mediante el uso de catalizadores, como el platino o el paladio.
En resumen, la oxidación es un proceso químico que ocurre cuando un compuesto pierde electrones y aumenta su carga positiva. Este proceso puede ser catalizado por el oxígeno u otros oxidantes y puede tener consecuencias importantes en la química y en la vida cotidiana, como la formación de óxido de hierro o la combustión de combustibles fósiles. La palabra «oxidación» proviene del latín «oxidare», que significa «combinar con oxígeno».
Fuentes:
- Real Academia Española. (2021). «Oxidación». En Diccionario de la lengua española. Recuperado de https://dle.rae.es/oxidaci%C3%B3n
- Encyclopædia Britannica. (s.f.). «Oxidation-reduction reaction». En Encyclopædia Britannica. Recuperado de https://www.britannica.com/science/oxidation-reduction-reaction